14 • 4 DE FEBRERO 2021 POLÍTICA
Funcionarios horrorizados por la desproporcionada
distribución de vacunas COVID-19 en Nueva York
Por: Mark Hallum
elcorreo@schnepsmedia.com Blancos: 48%. Afroamericanos:
15%. Latinos: 15%. Asiáticos: 11%.
Esos fueron los datos demográfi
cos publicados sobre las tasas de
vacunación en la ciudad entre los grupos
étnicos, lo que generó la ira de varios
funcionarios electos que estiman
hay demasiadas barreras para muchos
neoyorquinos.
Aunque enfurecidos, nadie se sorprendió
realmente, ya que algunos
habían pedido un lanzamiento equitativo
de la vacuna desde que las dosis
comenzaron a llegar a Nueva York a
mediados de diciembre.
“Durante semanas, he pedido que
el Departamento de Salud e Higiene
Mental de la ciudad divulgue los datos
demográfi cos raciales en tiempo
real sobre quién está recibiendo la
vacuna COVID-19, y ahora que fi nalmente
la tenemos, es exactamente lo
que he temido”, dijo el presidente del
condado de Brooklyn, Eric Adams. “El
hecho de no administrar esta vacuna
a las poblaciones más necesitadas,
las comunidades que más han sufrido
el impacto desigual de la pandemia,
es una mancha en la reputación
del Ayuntamiento que no se borrará
pronto”.
Adams sugirió acelerar las próximas
dosis disponibles de la vacuna
en las comunidades de color de alto
riesgo, adoptando el plan propuesto
en una legislación reciente que daría
a los departamentos de salud locales,
autoridad para priorizar sus propias
comunidades y prohibir estrictamente
a las personas que viven fuera de los
cinco condados de ir a instalaciones
dentro de los límites de la ciudad.
El contralor de la ciudad, Scott
Stringer, realizó una conferencia de
prensa luego de la publicación de los
datos el domingo por la mañana, indicando
que solicitó a la ciudad transparencia
sobre el lanzamiento de las
vacunas que refl ejara el hecho de que
las comunidades de color sufrieron
desproporcionadamente en la primavera
durante el apogeo de la pandemia
de COVID-19.
“Mira, entiendo muy bien que este
virus fue una sorpresa. Y las pruebas
se intensifi caron lentamente, y gran
parte del comienzo de esto fue realmente
difícil. Pero sabíamos que esta
vacuna iba a llegar, casi desde la
aparición del virus. Tuvimos muchos,
muchos meses para planifi car, tuvimos
muchas oportunidades de poner
recursos en las comunidades que
sabíamos iban a tardar para obtener
esta vacuna”, dijo Stringer.
Stringer también recomendó restringir
el acceso a la vacuna a quienes
viven fuera de la ciudad de Nueva
York y, en cambio, aumentar los esfuerzos
en las comunidades donde se está
distribuyendo.
“Vacuna para Todos”
Por su parte, el alcalde Bill de Blasio
se comprometió a expandir el grupo de
trabajo, “Vacuna para Todos”, diseñado
para llevar la vacuna a las comunidades
desatendidas en 33 vecindarios.
“La discriminación es aún más dura
en los lugares que históricamente han
sufrido más y donde hay mayores problemas
como la falta de atención médica”,
dijo de Blasio el domingo en una
conferencia de prensa. “Pero sabemos
dónde ha estado el mayor sufrimiento,
sabemos dónde ha habido más muertes.
Sabemos dónde ha estado históricamente
la mayor falta de atención médica,
en comunidades de inmigrantes,
comunidades de personas de color, que
sufrieron la peor parte de esta crisis”.
Pero el defensor público Jumaane
Williams, ha escuchado sufi ciente sobre
el tema. Los datos solo mostraron
un “fracaso abyecto” por parte de la
administración de la alcaldía.
“No quiero volver a oír hablar de un
grupo de trabajo, no quiero oír hablar
de ello. Estamos empezando a pensar
en la planifi cación. Tuvimos casi un
año para pensar en esto, defi nitivamente
tuvimos de seis a ocho meses para
pensarlo. No hay ningún problema que
se esté señalando hoy que no sabíamos
hace ocho meses “, dijo Williams. “Las
comunidades más afectadas deberían
tener las respuestas más fuertes”.
El gobernador Andrew Cuomo, durante
su sesión informativa pocos
minutos después de que De Blasio revelara
los datos, dijo que él no los había
visto, pero que su administración había
revisado datos similares relacionados
con las vacunas y los trabajadores de la
salud. La mayoría de los criterios para la
distribución de la vacuna no se refi eren
al estado residencial, aunque algunos
proveedores lo requieren antes de administrar
la inyección.
“Hay algunos sitios que requieren residencia,
pero son la excepción, no la regla”,
dijo Cuomo. “Apuesto a que lo que
estamos viendo, anecdóticamente, y lo
que estamos viendo en las encuestas y
lo que hemos estado escuchando desde
el primer día, es que hay más dudas
entre los afroamericanos”.
Según Cuomo, los trabajadores de
la salud de raza negra de Nueva York
parecen mostrarse reacios a tomar la
vacuna incluso cuando trabajan en una
instalación que la distribuye. Él cree que
este es un mejor grupo de control e indica
confi anza mientras elimina variables
como el acceso, que era la principal
preocupación de los datos de la ciudad.
“No es sufi ciente acceder si la gente
no lo acepta, y es por eso que vamos a
iniciar una campaña publicitaria”, dijo
Cuomo.
A diferencia de los datos de la ciudad,
Cuomo dijo que el estado ha rastreado
a los trabajadores de la salud blancos,
hispanos y asiáticos que tienen más
probabilidades de tomar la vacuna que
los neoyorquinos negros.
Un trabajador de la salud prepara una dosis de la vacuna Moderna Covid-19. Jeenah Moon / Pool vía REUTERS
link
link